El cambio de hora: hay quien lo vive dos veces al día

Lo del cambio de hora, que es una circunstancia que la mayoría no vive más que una vez al año, hay quien lo sufre prácticamente a diario. Son trabajadores que cambian dos veces de hora cada día. Es la gente que vive y trabaja en la frontera, a caballo entre España y Portugal. Dicen estar acostumbrados.

A un lado España, al otro Portugal. Lleva un minuto cruzar en coche y un viaje en el tiempo. "Portugal es una hora menos, al cruzar se cambia, ya no nos damos ni cuenta", relata Justi, un trabajador transfronterizo. Es un caso único en Europa el de esos cientos de trabajadores que por la diferencia de horario a un lado y otro de la 'raya' viven 2 cambios cada día.

Más que un lío mental, es una ventaja, comentan algunos, como Julia. "Salgo de trabajar y puedo ir a comprar", comenta tratando de encontrar ventajas en lo que parece un inconveniente. Isabel, que se ha criado también entre los dos lados de la frontera redunda en esa idea: "Vamos viendo la hora, y según nos interesa vamos a un sitio u otro". Ellos, a base de cruzar cada día la frontera más larga de Europa se han acabado por convertir en expertos relojeros.